Esperanza Aguirre se va , pero en el PP otra esperanza asoma con cara de mujer. Parece un trabalenguas pero no lo es. Cristina Cifuentes dirigirá la gestora del PP en Madrid tras la dimisión de Aguirre.
Ojalá que lo haga bien. Y lo digo con doble interés. Primero como española, porque a estas alturas necesitamos creer en la inocencia, y segundo como mujer.
¿Que por qué? Porque NO siempre las que han llegado a ocupar cargos de gran proyección han sido dignas representantes de la mujer como profesionales coherentes y preparadas. Algunas parece que al llegar al puesto son invadidas por la idiotez más absoluta, de modo que flaco favor nos hacen a quienes luchamos por la igualdad de oportunidades. Pienso por ejemplo en Cristina Fernández de Kirchner, qué daño nos hizo a las mujeres. Y es una pena, y una injusticia, porque cuando un hombre lo hace mal, y lo hacen muchos, esto no salpica al resto de los hombres profesionales.
Por supuesto que hay mujeres extraordinariamente magníficas y ocupando puestos de gran responsabilidad, pero su buen hacer no nos salpica de la misma manera. Otras muchas cuentan con menos proyección internacional o social, de manera que pasan más desapercibidas y su labor más en silencio.
Cifuentes es valedora de buena fama. Hoy se diría «tiene buena marca personal». Ojalá que su andadura sea un acierto . Y de paso que nos deje bien paradas.
© Josefina Escudero